Casi la mitad de las muertes en nuestro país se deben a enfermedades cardiovasculares. Los polacos son reacios a cuidar su corazón y evitan visitar al médico en la medida de lo posible. El diagnóstico precoz es importante para prevenir las desagradables consecuencias de las enfermedades del corazón, que en última instancia pueden ser incluso mortales. ¿Por qué es importante someterse a revisiones periódicas del corazón y a qué médico debe acudir si nota algún problema cardíaco?
Índice
¿Quién es un cardiólogo y qué hace?
Un cardiólogo no sólo se ocupa de los defectos congénitos del corazón, sino también de las enfermedades cardiovasculares, que causan muchas molestias y son la principal causa de muerte en nuestro país. Basándose en exámenes no invasivos como el ECG o la ecografía, este médico puede diagnosticar inicialmente el problema y recomendar el tratamiento adecuado.
Las visitas regulares al cardiólogo son importantes, especialmente para las personas que luchan contra la hipertensión. Permiten un control constante del sistema cardiovascular y garantizan un tratamiento adecuado en cada fase de la enfermedad.
La derivación al cardiólogo puede hacerse durante una visita al médico de cabecera. Si tiene poco tiempo, es aconsejable concertar una cita privada; no es necesaria la derivación. Sin embargo, debe saber que si acude a una consulta de pago, el Fondo Nacional de Salud no le reembolsará las pruebas adicionales.
¿Cuándo acudir al cardiólogo?
La mayoría de nosotros asociamos las enfermedades del corazón con fuertes dolores localizados en el pecho. Esos síntomas, sobre todo si empeoran después de un esfuerzo, son una indicación absoluta de visita urgente al cardiólogo. Por desgracia, las enfermedades cardiovasculares se desarrollan muy a menudo de forma asintomática o provocan molestias que no están asociadas al corazón.
Síntomas inusuales que pueden derivarse de una enfermedad cardiovascular
- dolor de mandíbula
- sangrado de las encías
- mal aliento,
- dolor en el brazo
Síntomas típicos de las enfermedades del corazón y el sistema circulatorio
- dolor en el pecho,
- dificultad para respirar,
- palpitaciones
- fatiga rápida,
- desmayos,
- mareos.
¿Cuándo acudir al cardiólogo?
Debe acudir siempre a un cardiólogo si sospecha que sus dolencias están causadas por problemas cardiovasculares o del corazón. Un buen cardiólogo es capaz de diagnosticar rápidamente el problema y mejorar nuestra calidad de vida instaurando el tratamiento adecuado.
Cardiólogo: ¿qué hace y cómo es la visita?
Muchas personas se preguntan cómo es una visita al cardiólogo antes de ir a ver a uno. En realidad, no es muy diferente de una visita típica al médico. Lo primero que tiene que hacer el cardiólogo es elaborar un historial lo más completo posible. El siguiente paso es medir la tensión arterial del paciente y escucharle atentamente.
¿Qué examina el cardiólogo?
El cardiólogo examina principalmente nuestro corazón. Para ello, puede utilizar pruebas especializadas como un ECG. Esto permite evaluar con precisión el funcionamiento del corazón. Si se sospechan enfermedades de este órgano, se realizan pruebas adicionales como:
- Holter Cardíaco,
- Holter ECG,
- Pruebas de esfuerzo.
- Eco cardiaca,
- ULTRASONIDO.
Sólo un diagnóstico completo permite una valoración definitiva de nuestro sistema cardiovascular. Nos permite instaurar un tratamiento farmacológico eficaz o, si es necesario, realizar procedimientos especializados. En realidad, todo depende de la enfermedad que se haya diagnosticado.
¿Por qué no se debe posponer la visita al cardiólogo?
Cuanto más tarde se visite a un especialista, menores serán las posibilidades de curación; conviene tenerlo en cuenta la próxima vez que empiece a explicar sus problemas con el mal tiempo y el agotamiento. Los problemas cardiacos suelen subestimarse porque al principio no son demasiado graves.
Por desgracia, cuando aparece un dolor torácico intenso, el asunto ya es muy grave y requiere atención médica inmediata. Las visitas regulares a un especialista, combinadas con el autocontrol de la tensión arterial, pueden no ser garantía al 100% de una larga vida, pero sin duda evitan las desagradables consecuencias de las enfermedades cardiovasculares, que en casos extremos acaban con la rápida muerte del paciente.
Debemos recordarlo y no subestimar ni siquiera las molestias aparentemente triviales que pueden indicar problemas cardíacos.
Carmen López
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